MPLS, o conmutación de etiquetas multiprotocolo, es una tecnología de red que suelen utilizar las empresas para conectar sus webs remotas, o los proveedores de internet para la segmentación del tráfico de capa 2 / capa 3. Se trata de una tecnología que existe desde hace más de 20 años, y muchas empresas siguen confiando en ella.
Laura Klusaite
Jan 10, 2022 · 4 minuto de lectura
Aunque en algunas ocasiones se hace referencia a la MPLS como el protocolo MPLS, en realidad no es tanto un protocolo sino más bien una técnica de enrutación. Vamos a ver con más en detalle en qué consiste el MPLS, cuáles son sus principales usos, y en qué contextos te conviene instalar este tipo de red en tu empresa o tu organización.
Para entender en qué consiste el MPLS, conviene revisar cómo funciona el enrutamiento habitual de una red. Cuando visitas una web en tu navegador, tus peticiones web se dividen en pequeños trozos de información llamados ‘paquetes’. Cada paquete lleva información sobre su destino y su procedencia, y es gracias a esta información que los routers pueden reenviar los paquetes a otros routers. Así es como los paquetes se mueven por la red.
Si una red normal funciona así, entonces, ¿cómo funciona el MPLS? Bueno, el MPLS (conmutación de etiquetas multiprotocolo) es un sistema de reenvío de datos que asigna etiquetas a cada paquete. Estas etiquetas determinan cómo debe viajar ese paquete, creando una red privada en el proceso. Como los paquetes se etiquetan entre su transición de la capa 2 (responsable de la transferencia de datos entre nodos) a la capa 3 (responsable del reenvío de paquetes y del ruteo), el MPLS suele denominarse ‘protocolo de capa 2.5’.
Como indica su nombre, la red de área amplia definida por software (SD-WAN) es un enfoque basado en software para gestionar una WAN (red de área amplia). Una de las razones por las que se diferencia del MPLS es que la SD-WAN consiste en un sistema más avanzado que el MPLS. La SD-WAN es más segura, es menos costosa y ofrece un mejor rendimiento que el MPLS.
Tanto el MPLS como la SD-WAN se utilizan para la conectividad de la red: por ejemplo, sirven para conectar a los usuarios que trabajan desde casa con la sede central o las sucursales remotas de su empresa.
Algunos especialistas en informática afirman que, en el futuro, el MPLS será desplazado por la SD-WAN, pero en realidad no son tecnologías exactamente idénticas, y ambas tienen sus casos de uso específicos.
Aunque en internet es frecuente ver búsquedas comparativas entre MPLS y VPN, en realidad esto es como comparar manzanas y naranjas. Se trata de tecnologías diferentes que se utilizan para fines distintos: el MPLS es una tecnología de red, mientras que una VPN es una herramienta diseñada para encriptar tu tráfico y ocultar tu dirección IP ante miradas indiscretas.
Ambas son opciones perfectamente complementarias que puedes utilizar en diferentes contextos. Por ejemplo, puedes contratar una VPN para negocios con la intención de proteger los datos enviados y recibidos por todos los dispositivos de tu empresa, y al mismo tiempo contar con una red MPLS para agilizar la conexión de red de tu empresa a nivel interno. En este sentido, una MPLS network y una conexión VPN son compatibles.
Entre los usos interesantes de una VPN se encuentra la posibilidad de encriptar tu tráfico de internet, de manera que lo mantendrán al margen de posibles filtraciones o ataques de terceros. Esto es algo que no puedes hacer con una red MPLS. Asimismo, una VPN también se puede utilizar para enmascarar tu dirección IP, lo que te permite ocultar la ubicación geográfica de los dispositivos desde los que te conectas.
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